El ídolo local protagoniza la sorpresa en la final de Brisbane. Ha conseguido levantar el titulo, tras superar a Federer por un ajustado 6-1 4-6 6-3.
Lleyton Hewitt ha vuelto a tocar el cielo después de superar a Roger Federer en un encuentro apretadísimo que alcanzó las 2 horas y 7 minutos de duración. El tenista australiano dio la campanada y derrotó contra pronóstico al número 6 del mundo.
El partido se puso de cara rápidamente para Hewitt. Consiguió la primera rotura en el primer juego y se puso 2-0 tras consolidar su servicio. Roger empezaba con malas sensaciones y las arrastró durante toda la manga, ya que Lleyton volvió a romperle el servicio dos veces más y cerró en 27 minutos el primer set con 6-1 en el marcador. Al helvético, no le quedaba otra que reaccionar y así lo hizo.
El segundo set arrancó con igualdad. Ninguno de los tenistas cedia su saque. El pupilo de Edberg sabía que otro quiebre podría suponerle la derrota y se notaba la tensión en la cancha.
El partido llegó al 4-4 sin ninguna rotura, aunque el australiano, con 4-3 arriba al resto, tuvo una oportunidad de break, que podría haber sido definitiva. No la aprovechó y, en el noveno juego del set, Federer consiguió romper por primera vez en el partido el servicio del australiano. Con 5-4 y saque, el suizo ganó sin problemas su juego y forzó el tercer y último set.
La tercera manga empezó con mucho sufrimiento para los dos tenistas. Hewitt salvó cinco puntos de rotura en el juego que abría el set, aunque finalmente consiguió adjudicárselo.
Federer también cumplió al servicio y el set empezaba 1-1. El “aussie” volvió a ganar su saque y, en el cuarto juego del set, consiguió el quiebre definitivo que consolidaría en el siguiente juego para colocarse 4-1 en el marcador. A partir de ahí, los dos jugadores mantuvieron sus respectivos servicios hasta llegar al 6-3 final para el australiano.
Con este título, Lleyton Hewitt suma un total de 29 en toda su carrera y consigue su primer trofeo desde el año 2010. De esta manera, Lleyton empieza el año de forma increíble. El número 62 del mundo, que escalará varias posiciones mañana lunes, no volverá a las pistas hasta el Open de Australia, donde se le verá con ganas de hacer una buena actuación.
Por otro lado, Federer llegará a Melbourne con sabor agridulce, después de esta derrota. Aunque las sensaciones hayan sido buenas durante la semana, este no ha sido un final feliz. Ahora está por ver sí será capaz de volver a pelear y luchar por intentar alzarse con el primer Grand Slam del año.
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